Uno de los sitios clave en tu consultorio, es por ello que debes tener una especial atención en todo el mobiliario que incluirás. Dependiendo del color de la pintura de las paredes, de tu logotipo y concepto, también debe elegir los sillones y muebles que incluirás en este espacio.
Colores básicos son el negro, blanco, azul, incluso me encontrado con sillones verdes pistache que combinaban muy bien con el concepto de frescura, colores blanco y repisas de cristal que maneja una cirujana plástica, o, incluso el rosa para ginecología. No hay reglas, esto dependerá en gran medida de tu personalidad, sin embargo trata de evitar tonos como el gris, café, verde oscuro o rojo. Por supuesto que el blanco es sinónimo de pulcritud y salud.
El mantenimiento de los sillones debe realizarse periódicamente, un cálculo rápido, si atiendes un promedio de 15 personas diarias, en 6 días son 90 personas que tomaron asiento en sus sillones, tarde o temprano se desgastarán, el mantenimiento es importante ya que es parte de la comodidad que se ofrece al paciente antes de tomar la consulta y además el cuidado de los materiales ofrece equilibrio visual.
Evita plantas que puedan causar alergia a los pacientes o incluso la proliferación de animales, puedes decorar con un pequeño bonsái, o si tienes vista a jardines aprovéchela con grandes ventanales y así ofrecer naturaleza sin que esté expuesta al contacto del paciente.
Cuida las corrientes de aire, mantén aromatizada la sala de espera con olores agradables. Si vas a incluir televisores vigila la programación, ya que debe estar ligada a los intereses de tus pacientes de acuerdo al segmento meta.
Coloca revisteros y cada mes actualiza las revistas, deseche aquellas que ya tengan por lo menos dos meses, aun cuando tu asistente se ocupe de este aspecto, como pacientes percibimos que el gusto de las revistas es del médico, por ello vigila la información o entretenimiento que ofreces a tus pacientes.
Incluye un dispensador de agua para los pacientes, incluso té o café. Evita alimentos. La iluminación es importante, debe ser agradable sin ser muy tenue, no deseamos pacientes dormidos o que entren en estado de pasividad que posteriormente se traduzca en neutralidad hacia sus servicios, queremos que su percepción sea agradable y profesional.
Y las recomendaciones siguen y las tendencias cambian, como consejo final, nunca te acostumbres a tu consultorio, obsérvalo siempre como si fuera la primera vez que lo conoces, así evitarás la ceguera laboral y podrás identificar rápidamente elementos fuera de lugar.
¡Éxito!
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